Susana Giménez considera al Padre Grassi una ofensa para la iglesia

Susana Gimenez habló con Antonio Gasalla sobre el Padre Grassi, quien ella considera una ofensa para la iglesia.

Extremista

Anoche, tal como cada domingo, Susana Giménez recibió a La Abuela, el querido personaje caracterizado por Antonio Gasalla, en su prestigioso living. Durante la charla, la diva de los teléfonos reveló que considera al Padre Julio César Grassi una ofensa para la iglesia. Dicha declaración de la conductora de Telefe fue dicha mientras ambos dialogaban respecto a la condena que el religioso recibió de 15 años de prisión tras ser acusado de abuso sexual y corrupción de menores.

Una conversación que inició con el equipo de fútbol del Vaticano llevó a Susana Giménez y a La Abuela (Antonio Gasalla) a hablar sobre la pena que recibió El Padre Grassi, quien recibió la confirmación de La Sala II de la Cámara de Casación Penal de Buenos Aires de la pena que había recibido en el mes de junio de 2006.

«Es una ofensa para la iglesia», afirmó la diva de los teléfonos haciendo referencia al clérigo y, muy firme en sus palabras, continuó: «Dicen que no hay justicia y cuando la justicia se expide se quejan».

Recordemos que, hace dos años, el Padre Grassi acusó a Susana Giménez de organizar un complot en su contra junto a Jorge «El Corcho» Rodríguez y el ex montonero Rodolfo Galimberti, quien falleció en el año 2002.

3 comentarios en “Susana Giménez considera al Padre Grassi una ofensa para la iglesia”

  1. Susana Gimenez sigue dando muestras de ignorancia supina. No lo digo porque se ve que NO SABE NADA DE LA CAUSA, sino porque tiene la RESPONSABILIDAD de no abrir juicios de ningun tipo debido a que su «opinion» pesa sobre toda la sociedad. Si opino yo, que nadie me conoce, no es lo mismo que «opine» ella. Crea una imagen FALSA de la relacion del Padre Grassi con nosotros, nuestra sociedad y la Iglesia. Ademas de que el Padre Grassi es INOCENTE.
    Susana, el que este libre de culpa QUE TIRE LA PRIMERA PIEDRA.
    No podes hablar de nadie, y mucho menos del Padre Grassi.

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