«Violetas para Mercedes», poesía de Joaquín Sabina a La Negra Sosa

La muerte de La Negra Sosa no solamente ha causado dolor al pueblo argentino sino que también ha tenido repercusión en todos aquellos países a los que ha llegado su arte. Es por ello que muchos artistas decidieron compartir su sentimiento con el público escribiendo cartas dirigidos especialmente para ella. Uno de ellos es Joaquín […]

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Joaquin Sabina y La Negra Sosa en Extremista.comLa muerte de La Negra Sosa no solamente ha causado dolor al pueblo argentino sino que también ha tenido repercusión en todos aquellos países a los que ha llegado su arte. Es por ello que muchos artistas decidieron compartir su sentimiento con el público escribiendo cartas dirigidos especialmente para ella. Uno de ellos es Joaquín Sabina, cantautor español que escribió la poesía titulada «Violetas para Mercedes».

Mientras se prepara para que su nuevo álbum sea lanzado el 17 de noviembre, Joaquín Sabina se hizo un tiempo para escribir una poesía a Mercedes Sosa, artista argentina que ha fallecido el domingo 4 de octubre.

Seguramente, estas palabras no tardarán en convertirse en una nueva canción de Sabina.

«Violetas para Mercedes», la poesía de Joaquín Sabina a La Negra Sosa:

Se nos murió la gran dama,
Negra Sosa, pacha mama
de Corrientes,
que bordó puntos y comas
en las prisas del idioma
de la gente.

Martina Fierro de ley
que sin Dios, patria ni rey
tiró p’alante,
antes de decir adiós
me propuso un blues a dos
voces distantes,

distintas, y, sin embargo,
cerquita del ron amargo
que consuela,
que abruma, que mortifica,
que suma, que santifica,
que desvela.

Cuando rompió la baraja,
hizo del bombo su caja
de Pandora,
entre el mestizo y el yanqui
se quedaba con Yupanqui
hasta la aurora.

Todos menos uno, dijo,
provocando el acertijo
de Cosquín,
militante del futuro,
no pudo con ella el muro
de Berlín.

Canto ancestral de Argentina,
la más frutal de las minas,
todo es nada,
no sabe cómo la lloro,
desafinando en el coro
de las hadas.

Madrina de los roqueros
más intrusos, más villeros,
menos brutos;
en calle melancolía
mi letra y su melodía
visten de luto.

Más de una vez la besé
pero nunca olvidaré
la noche aquella:
aquel piano y su voz
y mi sonanta y la coz
de las estrellas.

Me aterran las despedidas
pero gracias a la vida
de Violeta,
Mercedes inventó el son
que duerme en el corazón
de los poetas

Joaquín Sabina
La Chacarita, Septiembre 2009