San José Manyanet y Vives nació el 7 de enero de 1833 en Lérida, España, que fue un sacerdote católico beatificado por el Papa Juan Pablo II y canonizado el 16 de mayo de 2004. El 16 de diciembre, el Santoral Católico le dedica su día del almanaque. Se lo recuerda promover la construcción del Templo Expiatorio de la Sagrada Familia, la monumental obra aun inconclusa de Antonio Gaudí, ícono de Barcelona.
Josep Manyanet y Vives, fue bautizado el mismo día en el que nació. Su padre murió cuando solo tenía 20 meses, y cuando el niño tenía 5 años fue ofrecido por su madre a la Virgen de Valldeflors, patrona de la ciudad.
Influenciado por el sacerdote Valentín Lledós, Josep cultivó su vocación por la religión. Realizó sus estudios en la escuela Pía de Barbastro, y el 9 de abril de 1859, fuer ordenado sacerdote en los eclesiásticos en los seminarios diocesanos de Lérida y la Seo de Urgel.
Sant Josep Manyanet i Vives, fundó la «Congregación de Hijos de la Sagrada Familia» y la «Congregación de Misioneras Hijas de la Sagrada Familia de Nazaret», fomentando la educación cristiana de niños y jóvenes.
A partir de 1875, luego de ser obligado a cerrar una de las primeras escuelas, volvió a su pueblo natal para fundar escuelas dentro de los alrededores de Barcelona, extendiendo la red por varias poblaciones de Catalunya y resto de España.
Hoy en día, la congregación masculina, también llamada Manyanetianos, tienen escuelas, asilos de huérfanos y liceos no solo en España, sino que también en Argentina, Brasil, Colombia, Estados Unidos, Italia y Venezuela.
Por su parte, la femenina, tiene casas en Brasil, Camerún, Colombia, Ecuadoer, Paraguay, Venezuela y su casa general en Roma, Italia.
José Manyanet y Vives escribió varios libres para propagar la devoción de la Sagrada Familia, y con este fin, inspiró la construcción del Templo de la Sagrada Familia, uno de los atractivos más espectaculares de Barcelona que terminará de construirse en 2032.
Josep murió el 17 de diciembre de 1901 en Barcelona a los 68 años de edad. El Papa Juan Pablo II, lo declaró beato el 25 de noviembre de 1984, y fue canonizado el 16 de mayo de 2004. El santoral católico celebra su festividad el 16 de diciembre de cada año.
